RETRATO SUSANA es una de las obras más tempranas de Helena Zapke, y guarda una relación estilística con otras de esta misma época. ES un momento de experimentación pictórica,  de descubrimientos , y de identificación con una forma de pintar. . En esta obra, como en otras de este momento, a pesar de la inexperiencia de la artista, es notable la seguridad con la que se define el retrato en solo unas cuantas pinceladas y gestos. 

ANÁLISIS TÉCNICO:

Se aprecia un estilo sintético, enérgico, de pinceladas firmes y expresivas. No interesa el detalle, ni la veracidad del resultado, y sin embargo, el parecido con la persona retratada es indudable. Tampoco interesa el fondo, o espacio que rodea a la figura, que es representado de forma simbólica, con un campo de color rojo, una raya gruesa, y un esbozo de un volante, lo que nos indica que la figura está en un coche, abierto por arriba. El  color rojo del fondo contrasta y resalta el retrato, resuelto con negro y azul . El rostro se representa con trazos sencillos pero certeros .

ESTILO

Retrato Susana guarda relación y coherencia con otras obras de esta etapa temprana de Helena Zapke: responde a un tipo de pintura expresionista, casi fauvista en la energía de las pinceladas y en la síntesis del color  y del gesto. Espontaneidad y rapidez en la resolución de la obra, con gestos certeros.